Allí tengo controlada una zona en la que crecen los semper en relativa abundancia. Hablamos de Sempervivum cantabricum ssp. cantabricum.
Uno se puede tirar horas pateando la montaña sin ver una sola roseta, hasta que llega al lugar justo y entonces empiezan a aparecer por doquier. Al margen de que, lógicamente, estas plantas tendrán unas preferencias en cuanto a orientación, etc., me resulta curioso que se concentren de esa manera en zonas muy pequeñas. Parece lógico que, dado su sistema de reproducción vegetativa, la expansión de una roseta se produzca por zonas próximas, dando lugar entonces a esas “zonas de abundancia”. Pero ¿y las semillas? ¿por qué no favorecen la extensión de la planta a otros lugares?.
En fin, son cuestiones que los botánicos sabrán resolver, seguramente. De momento, paso a mostraros una selección de fotos que hice.
Crecen en una zona de abundante piedra caliza, con mucha mancha de hierba, musgo, etc., una zona con humedad abundante, tanto en el suelo como en el aire, especialmente debido a las frecuentes nieblas que cubren los Lagos. Crecen tanto entre la hierba (bastante tapados por ésta, en ocasiones), como en la roca, aprovechando resquicios y oquedades donde haya una mínima cantidad de sustrato disponible.
En estas fotos se aprecia muy bien la característica pilosidad de las hojas ("piloso-glandulosas", dicen los botánicos). Podéis ampliar las fotos:
Sólo hay otra planta que colonice tanto y tan bien este sustrato rocoso: Saxifraga paniculata. Muy abundante por todos lados, y formando grandes "manchas" de rosetas. Realmente bonita:
Pero, a pesar de los méritos de la saxifraga, he de reconocer mi debilidad por los sempervivum. Esa manera de colonizar las grietecillas:
Un agujero entre las rocas y un poco de sustrato es suficiente para establecer una "familia":
Aquí, acompañado de otras crassulaceas (Sedum album y Sedum dasyphyllum):
Las rosetas que crecen en exposiciones más soleadas, como las que siguen a continuación, presentan crecimiento desproporcionado de algunas hojas, probablemente con el fin de proteger el centro de la roseta del exceso de radiación solar:
No sé si será uno de sus platos preferidos, probablemente no, pero lo cierto es que algunas cabras se entretienen mordisqueando los tiernos centros de las rosetas:
Y aunque era agosto, y ya estaba pasada la época de floración, algunos ejemplares más o menos rezagados sí encontré. Estos dos con flores, creciendo en una zona más umbría (fijáos en la forma y color de las rosetas):
Una curiosa roseta con capullos a punto de abrirse y que, extrañamente, no ha desarrollado vara floral (y, abajo, Sedum album):
2 comentarios:
Muy bonito reportaje, me encanta ver las plantas en su habitat, espero poder ir de excursión un dia de estos, bonitas fotos.
me han facinado tus post, muy interesante, siempre me causa felicidad ver fotos de plantas en su habitat, y estas plantas si que son presiosas, conosco muy poco, pero lo que he visto me ha facinado.
Besos!!!!
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